domingo, 16 de marzo de 2014

La pasividad de la Policía Local y el Ayuntamiento de La Orotava permitió que un cabrero torturara a su perro guardián hasta la muerte

La pasividad de la Policía Local y el Ayuntamiento de La Orotava permitió que un cabrero torturara a su perro guardián hasta la muerte.

La muerte de un pastor alemán por su propietario evidencia al grupo de gobierno
EDDC.NET | SANTA CRUZ DE TENERIFE

La brutal mordaza que acabó con la vida de este perro.
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No es un hecho aislado. Pero éste muestra la crueldad infinita de un cabrero, que supuestamente por su contacto diario con los animales, de los que vive, no debería mostrar tanta saña y tanto odio para someter a su perro guardián a esta tortura, sin sentido y sobre todo, innecesaria.

El clamor ha sido unánime, pero está claro que existe una seria deficiencia gubernamental ante el maltrato animal, ante unas costumbres arraigadas en determinados sectores, basadas en que las mascotas son de única responsabilidad del propietario y que éste puede hacer lo que quiera con ellos, sin que ni voluntarios ni amantes de los animales puedan hacer algo al respecto.

Lo asombroso es que mucha gente conocía los presuntos malos tratos que este cabrero propinaba al perro, hasta el día que decidió encadenarlo y provocarle la muerte. Se sabe que esta persona además recibe subvenciones públicas por su actividad y vende queso en la cooperativa de Benijos.

De los pocos detalles que se saben sobre este espantoso caso de maltrato animal, es que algunas personas pudieron rescatar al perro encadenado, pero como había estado mucho tiempo atado de este modo, cuando se le llevó a la clínica, poco pudo hacerse, ya que murió a las tres horas.

Ni el Ayuntamiento, ni la Policía Local, se han dado ni por aludidos, ni por enterados. Y gracias a su indiferencia, tienen en su municipio este caso tan horrible, que merece una denuncia en Fiscalía y el paso de esta persona por los juzgados, para que de por lo menos esas explicaciones que hasta el momento se ha negado a dar. 

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